Soledad interior


Y es que cuánto peor me tratas mejor escribo. Tu indiferencia me hace grande. Me da el permiso que necesito para poder fantasear a mis anchas y crear entre letras todo lo que haría si no estuvieras aquí, si la vida fuere una vida sin tu hiel y tus desprecios.

Y es que cuánto peor me miras mejor pinto. Porque de la rabia de este amor fallido que me ata salen cuadros llenos de arte que expresan todo lo que ya no siento por ti.

Porque cuánto peor me amas más ensancho mis alas para compensar este dolor que es quererte sin quererlo. 

Y es que no todo el mundo sabe lo que es caminar de tu mano. Llena de espinas y vacía de rosas.

Cómo del amor hacía al hastío pudimos navegar sin uno darse cuenta. Movidos por  brisa amarga que ocupa el día a día llegamos a esa isla de falsa comodidad en la que tú y yo ya no somos nosotros.

                                     Relatos III, 


Comentarios